Las relaciones de pareja y el amor son una elección: dos personas que voluntariamente deciden compartir sus momentos y sus vidas. Para que este compartir signifique caminar y crecer de forma sana, no hay olvidar estas sugerencias para parejas:

  • Ante todo, conocerse bien (autoconocimiento). Saber qué se espera de las relaciónes de pareja, qué necesidades, qué miedos, qué expectativas; en definitiva, “poner el punto de realidad” a ese desborde inicial del enamoramiento, a ese primer deslumbre que muchas veces no deja ver el horizonte.
  • Conocimiento y respeto mutuo.
  • Comunicación, trabajando firmemente para que sea asertiva.
  • Transparencia en comunicar qué quieres, qué te gusta,
  • Sinceridad, honestidad, expresión clara.
  • Vínculo sexual: procurar que sea algo más que un encuentro de cuerpos. Que siempre sea el encuentro de personas. No reducirlo al intercambio físico, sino añadir además, intercambio de energías, intercambio psicológico, emocional.
  • Vivir las dificultades en las relaciones de pareja como oportunidades de crecer en pareja mediante la resolución de las mismas.
  • Conocerse, reconocerse, encontrarse a uno o a una misma y estar feliz para, llegado el momento de compartir, que sea un momento de sumar y de crecimiento en compañía.
  • Y finalmente, la importancia de no caer en los errores, en esas creencias en cuanto al “Amor”, que habría que evitar en la medida de lo posible para disfrutar de un amor maduro, inteligente, sereno y feliz.

Recomendaciones:

  • No creer que la vida en pareja no necesita ser aprendida, pues es un continuo aprendizaje. Es como la vida, en continuo cambio, dinámica.
  • No pensar que sólo basta con estar enamorado o enamorada, en las relaciones de pareja hay que mantener el amor cada día, en lo cotidiano, en los pequeños detalles del día a día.
  • No divinizar el Amor, eso de “sin ti no soy nada”, “no puedo vivir sin ti”, etc.
  • No pensar que las crisis de pareja no existen. Existen y son oportunidades para el fortalecimiento de la misma.
  • No suposiciones, etc.

Todo ello, son cosas que pueden ser trabajadas en sesiones de terapia de pareja. Cuando no sabemos o sabiendo cuál es el camino, no tenemos herramientas para llegar a él, es cuando ha llegado el momento de un acompañamiento profesional temporal.

M. Patrocinio (Patri) Haro López
Psicóloga Colegiada AN 4006.

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